El lunes 15 de mayo, a las 20:00 horas, el Museo de la Naturaleza y el Hombre acoge la presentación del libro que recoge los resultados del trabajo realizado por el equipo del Museo Arqueológico de Tenerife, la Universidad de La Laguna y el Cabildo de Fuerteventura en el islote de Lobos durante la campaña de 2012 y parte de la de 2013.
Las autoras del libro son Mercedes del Arco Aguilar (Museo Arqueológico de Tenerife), Carmen Benito Mateo (Museo Arqueológico de Tenerife) y Candelaria Rosario Adrián (Museo Arqueológico de Tenerife) y Carmen del Arco Aguilar (Departamento de Prehistoria de la Universidad de La Laguna).
Lobos 1 es un taller romano de púrpura de época altoimperial, especializado en la explotación de Stramonita haemastoma que se encuentra en el islote de Lobos (Fuerteventura), un espacio, hasta ahora, sin vestigios de ocupación antigua, y que nos lleva a redefinir los límites meridionales de la Ecúmene en época romana.
Los autores nos presentan, como resultado de las excavaciones arqueológicas sistemáticas que aún continúan, un profundo estudio del asentamiento y de los registros localizados en los trabajos de 2012 y una parte de los del 2013.
A través de esta monografía podemos reconocer la actividad de explotación especializada de los murileguli o conchileguli, que se asientan a pie de playa, montando un taller caracterizado por concheros, construcciones y espacios de ocupación al aire libre en los que se realizó la subsistencia cotidiana. Los registros permiten observar la cadena tecnológica de producción de la púrpura. También son importantes los materiales ligados a las actividades pesqueras, así como el ajuar para el mantenimiento del grupo, lo que hace singular a este taller, frente a otros conocidos en el Mediterráneo occidental y Atlántico.
Con ello, en definitiva, se confirma no solo la presencia del mundo romano en Canarias, sino sus intereses en la explotación de los recursos del archipiélago, que, por ahora, afectan al tratamiento de los Muricídos pero, que, sin duda, como se apuesta en esta obra, tuvo un mayor peso de signo Halieútico.
Estamos pues, de nuevo, poniendo sobre el tapete la discusión de la ubicación de las Islas Purpurarias de Pliunio, en las que Juba II habría instalado factorías de púrpura, y que la mayor parte de los investigadores vienen situando en la isla de Mogador.