El pasado 2 de noviembre fue presentado un nuevo módulo expositivo en el Museo de Naturaleza y Arqueología (MUNA) que bajo el título “Exodo y restitución de las momias guanches de Tenerife” pretende dar a conocer al público la localización y las vicisitudes de algunos de estos vestigios arqueológicos que actualmente se encuentran dispersos por la geografía mundial.
Desde que fueran dadas a conocer a raíz de la conquista europea, a finales del siglo XV, las momias guanches fueron sometidas a un expolio continuado tanto por parte de personas como de instituciones. Por ello, no es de extrañar que muchos de estos valiosos especímenes acabaran distribuidos en diferentes lugares del planeta (Península Ibérica, Francia, Alemania, Reino Unido, Rusia, Canadá y Estados Unidos, etc.). Sin embargo, un hecho por destacar es que, de todos los individuos referidos, solamente ha sido posible devolver a Tenerife cinco de ellos.
Por otro lado, dentro de este módulo expositivo el visitante podrá contemplar, entre otros recursos expográficos, una réplica de la momia que actualmente forma parte de las colecciones del Museo Arqueológico Nacional (MAN) ubicado en Madrid. A este respecto, se trata de un ejemplar que procede del Barranco de Erques (entre Güimar y Fasnia), concretamente de la gran cueva sepulcral donde, en el último tercio del siglo XVIII, también fueron hallados centenares de sujetos momificados. Además, dicha momia se corresponde con la de un varón adulto y está considerada como el vestigio arqueológico humano que mejor estado de conservación presenta de todos los que se conocen vinculados a la cultura guanche.