La conservadora de Paleontología y Geología del MUNA, Dra. Esther Martín González, ha participado en el 1er Workshop Internacional Paleontología en Islas Atlánticas Porto Santo & Madeira, celebrado entre el 8 y el 17 de abril. Esta workshop sigue la trayectoria iniciada desde hace casi 20 años en Santa María (Azores) por el Laboratorio de Paleontología Marina y Biogeografía de la Universidad de Azores, con el encuentro de científicos de diferentes disciplinas de la biología y la paleontología, y que se celebró por primera vez en Canarias en noviembre de 2021 en Fuerteventura. En esta ocasión, el workshop se ha realizado en las islas de Madeira y Porto Santo, donde se han podido prospecta diferentes yacimientos de ambas islas, junto a investigadores como Carlos Gois-Marques, paleobotánico de la Universidad de Madeira, Carlos Márques da Silva y José Madeira, de la Universidad de la Universidad de Lisboa, y Patricia Madeira y Carlos Melo, de la Universidad de Azores.
A pesar de su superficie, Madeira no presenta un registro paleontológico marino muy extenso, aunque sí posee importantes afloramientos paleobotánicos y eolianitas fosilíferas. Por el contrario, Porto Santo y los islotes de Cima y Cal, con edades comprendidas entre los 11 y 14 millones de años, poseen un extraordinario registro fósil marino, que se caracteriza por la presencia de arrecifes coralinos tropicales, que engloban también especies de algas coralinas (rodolitos), moluscos, y un amplio repertorio de trazas fósiles. La presencia en algunos de estos yacimientos de especies fósiles que también se encuentran en el registro paleontológico de Canarias, hace que se puedan establecer interesantes correlaciones bioestratigráficas y paleoecológicas entre ambos archipiélagos. Esther Martín destaca entre los yacimientos paleontológicos prospectados en este workshop los afloramientos del Ihléu de Cima, tanto Cabeço das Laranjas, situado en el extremo noreste, una concentración de rodolitos que pueden llegar a medir hasta 20 cm, depositados durante un evento de alta energía, como la zona de Pedra do Sol, un arrecife de corales fosilizado por un evento volcánico explosivo. Interesantes también son los yacimientos del Ihléu de Baixo o Cal, llamado así porque los arrecifes carbonatados que se encuentran en él fueron explotados históricamente para la obtención de cal, como también sucedió en Canarias con los caliches y algunos depósitos fosilíferos.
El desarrollo de este tipo de encuentros científicos ha dado lugar a más de 30 publicaciones científicas, tanto especializadas como de divulgación, en algunas de las cuales ha participado la mencionada conservadora, ampliando notablemente el conocimiento del patrimonio paleontológico de los archipiélagos macaronésicos.