El Museo de la Naturaleza y el Hombre acoge, desde el 29 de noviembre de 2014 y hasta el 10 de enero de 2015, la exposición “Piedra y Madera. Arquitecturas”, del artista Rafael Sanz.
La exposición está formada por dos grupos de esculturas diferenciadas. Por un lado, seis pequeñas esculturas desarrolladas a partir de un estudio sobre la proporción áurea y, por otro, ocho esculturas que dan nombre a la exposición.
El concepto de partida para la creación artística de estas piezas es la fascinación por las construcciones megalíticas como los menhires o dólmenes. Se trata de un proceso de búsqueda, a través de un procedimiento combinado de ensayo-error, en el que se utiliza técnica, intuición y geometría. El objetivo es encontrar formas que tramitan aquella fascinación y emoción que emana de las construcciones magalíticas.
“Partes que se sostienen en apoyos por gravedad, sin ensamblajes. Comienzo en las construcciones megalíticas y, después de recorrer un camino compuesto de muchos ensayos y muchos errores, llega un momento en que considero que me acerco a la emoción que busco y descubro, inevitablemente, influencias de todo lo que he asimilado a lo largo de mi vida, desde formas orgánicas a los arbotantes de las catedrales góticas, pasando por cadencias rítmicas musicales que, en algún momento, se han instalado en mi mente, y que reflejo en mi trabajo, precisamente porque este trabajo consiste en eso: expresar emociones”. Rafael Sanz.
Rafel Sanz Burgos es una artista madrileño cuyos trabajos más relevantes están vinculados a la escultura, joyería y grabados. Es precisamente en esta última disciplina donde destacan numerosas obras sobre papel y aluminio −realizadas desde el año 1996− relacionadas con el patrimonio arqueológico de las siete Islas Canarias.