La galería-mirador de esta sede del Museo de Historia y Antropología de Tenerife ofrece una buena panorámica de la localidad costera de Valle de Guerra.
Igualmente, sus amplios exteriores –fruto de su propia naturaleza de hacienda solariega destinada a la producción agrícola– resultan idóneos en esta época del año para pasear y contemplar la huerta o los jardines que muestran especies de todos los rincones del mundo, incluyendo ejemplares de la flora autóctona de Canarias.
De autoría incierta, la Casa de Carta debe su nombre a una de las familias más influyentes en la vida social, económica y cultural de Tenerife en el siglo XVIII: la familia Carta. Adquirida en 1726 a Lope Fernández de la Guerra por el Capitán Matías Rodríguez Carta, fue reedificada y restaurada casi en su totalidad.
Las actuales dependencias son el producto de una profunda restauración llevada a cabo por el Cabildo Insular a mediados de los años setenta del siglo XX, tras haber adquirido el inmueble como uno de los más singulares de la zona, en donde ya se utilizaban sus espacios como pequeño museo de antigüedades. Fue inaugurado como museo etnográfico el 24 de enero de 1987.
Constituye un notable exponente de vivienda solariega canaria del siglo XVIII, que, aunque adaptada al medio rural, queda patente su carácter noble, tanto por sus dimensiones como por su ubicación, sus materiales y los elementos arquitectónicos. Fue declarada Bien de Interés Cultural, en la categoría de Monumento, el 27 de enero de 2006.
Un recorrido por sus salas permite la contemplación de una selección de piezas de las colecciones más singulares que posee el Museo, así como la visita del interior de una vivienda solariega canaria con la característica carpintería de tea, distribución tradicional en torno a un patio central o algunas muestras notables de cantería artesanal.
De esta manera, los textiles y las indumentarias tradicionales se presentan mediante la explicación del proceso de elaboración de la seda en La Palma o la reproducción de los trajes históricos y populares de las Islas. Una parte de la colección de mobiliario popular lo conforma una selección de arcones de madera. También presentes con fondos procedentes de todo el Archipiélago se encuentran la cerámica y la cestería, así como los instrumentos musicales utilizados en las parrandas populares, a los que igualmente se les ha dedicado un pequeño apartado. La cocina-panadería o la importante variedad de molinos de gofio se reparten por estas estancias, a las que se les suma unos exteriores dedicados a jardines con especies de alto interés botánico y huertos con cultivos históricos, tales como el algodón o la caña de azúcar. Igualmente, en los lugares que circundan la casa, podemos encontrar un pesador de agua, un invernadero canario y el tradicional lagar.
Horario: todos los días de 10:00 a 17:00h.