Bajo este sugerente título nace esta atractiva propuesta didáctica que pretende acercar a los asistentes al fascinante mundo de la restauración y conservación donde conceptos como autenticidad, reproducción, reconstrucción, entre otros, cobran especial relevancia a la hora de trasmitir no sólo técnicas y pautas de actuación, sino también valores morales y educativos vinculados a todo lo que implica el respeto y la conservación de nuestro patrimonio.
Durante una hora y media, las personas interesadas que acudan a disfrutar de esta experiencia aprenderán a distinguir entre piezas auténticas y otras que no lo son tanto, a detectar lo que ha sido restaurado y lo que ha sido añadido o, simplemente, a identificar los distintos materiales utilizados para su elaboración. Todo ello a través de la los sentidos y poniendo en práctica sus habilidades y capacidades para escudriñar detalles y encontrar respuestas válidas, lo más certeras posible, a preguntas intrincadas y de difícil solución.
En definitiva, se trata de una forma diferente de conocer nuestras colecciones basada en un contacto más directo que va más allá de la mera contemplación para recalar en lo que estos piezas o especímenes nos cuentan, en la información que se infiere de estos meticulosos procesos y en las propias técnicas y materiales utilizados para tales fines.
Si quieres formar parte de esta experiencia solo tienes que ponerte en contacto con el Departamento de Educación y Acción Cultural del Museo (922 53 58 16) y reservar tu plaza.