La silla vitoriera de Tenerife tiene sus antecedentes en las sillas inglesas del siglo XVIII de estilo Chipendale. Se Fabricaba con distintas clases de madera, principalmente con brezo y castaño. Adaptada por los carpinteros insulares, presentaba numerosas variantes en el remate del respaldo y el dibujo de la pala. Las había dobles, triples en forma de canapé, con brazos, de costura con cajoncillo bajo el asiento, de retrete, etc.
Dos de ellas se encuentran expuestas al público como parte del mobiliario de uno de los espacios más genuinos y mejor conservados de la Casa de Carta (sede de Valle de Guerra del Museo de Historia y Antropología de Tenerife): la cocina.
«Tras el cristal» surge con la idea de recuperar del olvido aquellas piezas que, en su momento, fueron seleccionadas para formar parte del libro “Tras el cristal. Una visión de los museos del Cabildo de Tenerife”.