A unos 1.500 años-luz de distancia, dentro de nuestro brazo espiral en la Vía Láctea, encontramos la Nebulosa de Orión, en la Espada de la constelación de Orión "el Cazador", que domina el cielo nocturno a inicios del invierno. Las estrellas se han formado de nubes de gas interestelar que han colapsado en los últimos millones de años. Las nubes más masivas han formado las estrellas más brillantes cerca del centro, y éstas son tan calientes que iluminan el gas de alrededor.
Fotografía: Oswaldo González S.