A lo largo del primer trimestre de 2004, el MCC pondrá en marcha varias actividades destinadas expresamente al público infantil. Un sofisticado teatro de títeres, una sesión especial de Planetario y muchos experimentos y juegos científicos, que servirán para llenar las mañanas de los sábados.
La primera de estas actividades ya se encuentra a punto. El teatro de títeres, será estrenado el domingo día 25 de Enero, a las 11 de la mañana, trasladándose posteriormente a las mañanas de los sábados sucesivos.
Este teatro de títeres, lleva a escena la obra titulada «La Mentira de la Luna», un montaje teatral basado en un cuento infantil cuyo protagonista es la Luna. Con la ayuda del narrador, que es un astrónomo, se cuenta una fábula en la que las fases de la Luna aparecen como formas que ésta adopta para evitar ser capturada por los humanos.
Como es costumbre, esta actividad también ha sido diseñada y realizada por el propio personal del museo. «Ha sido un gran reto, conseguir traducir ideas científicas, a un lenguaje infantil, especialmente para menores de 7 años» declara Ángel Luis Pérez Morillo, autor de la obra y técnico del Planetario del MCC. Sin embargo, tras la aparente simpleza del lenguaje y de la obra se oculta un trabajo técnico complejo. A la escena del teatro de títeres tradicional se ha añadido una pantalla de proyección de vídeo, que permite a los numerosos personajes de la obra saltar frecuentemente del mundo real al mundo virtual. «El empleo de proyecciones de vídeo ha enriquecido enormemente el espectáculo, permitiendo la convivencia natural de muñecos, personajes reales y explicaciones científicas» declara Rubén Naveros, co-realizador del proyecto y también, técnico del Planetario del MCC.
Algunas dependencias del museo se han visto convertidas temporalmente en «castillo medieval» para grabar las escenas cinematográficas del astrónomo Meiyarán, que actúa como narrador e hilo conductor de la trama. En esta parte del proyecto el museo ha contado con la colaboración de los alumnos de cine de la Escuela Westerdahl
Las voces de los personajes han sido grabados en el mismo museo, bien por miembros del equipo como por personas ajenas al Museo, que han colaborado con mucho cariño en este proyecto. A su vez el montaje cuenta con una banda sonora original de Olga Alemán.
La mentira de La Luna se ha convertido antes de su estreno en un reto, el de recordarnos a nosotros mismos lo pequeños que hemos sido y cómo nos fascinaban las marionetas, los cuentos y las historias con final feliz.
FIN